El santuario de luciérnagas en Tlaxcala, uno de los espectáculos naturales más impresionantes de México, enfrenta una paradoja en 2025. Mientras la Secretaría de Turismo del Estado proyecta la llegada de 110,000 visitantes entre el 20 de junio y el 10 de agosto, científicos advierten que este flujo masivo amenaza la supervivencia misma de los insectos que generan la atracción.
Impacto medible, soluciones urgentes
La doctora Sandra García de la UATlx documenta tres amenazas críticas: 
- Compactación del suelo (daña huevos y larvas)
- Contaminación lumínica (interfiere con su apareamiento)
- Expansión de infraestructura turística no regulada
Estudios recomiendan limitar a 466 visitantes nocturnos en Nanacamilpa, cifra que las proyecciones oficiales superan ampliamente. Aunque la temporada genera 60 MDP en derrama económica, especialistas insisten en declarar el área como protegida y catalogar la especie en riesgo.
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Modelos de coexistencia posible
Casos exitosos como el Santuario de Piedra Canteada muestran que es viable:
- Capacitación a guías comunitarios
- Sendero delimitados con materiales naturales
- Horarios estrictos y grupos reducidos
- Prohibición absoluta de luces artificiales
La UNAM reporta que México alberga 280 especies de luciérnagas (segundo lugar mundial), pero las de Tlaxcala destacan por sus patrones de bioluminiscencia sincronizada. Su preservación requiere, según el CONACYT, inversión en investigación y planes de manejo con las comunidades locales.
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